A fin de transparentar las licitaciones y todo lo concerniente con la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, se solicitó a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), organismo que garantiza las mejores prácticas en la materia a nivel internacional, su participación en el proceso y la observación continua de la construcción de esta infraestructura.
Ayer, precisamente, Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) nos dijo que derivado de esta solicitud, la OCDE realizó un primer reporte en noviembre de 2016, que incluye 16 recomendaciones y un esquema de acciones para el manejo de riesgos del proyecto, todo lo cual se está realizando en colaboración con la SFP.
GACM desarrolla un mapeo de riesgos de corrupción, asesoría en conflictos de interés, ética, atención a denunciantes y autonomía de gestión. Es así como GACM refrenda su compromiso de aportar a la población información socialmente útil, proactiva y de interés público, como la relativa a la totalidad de los contratos celebrados.
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