El total de remesas este 2024 podría estar entre $66 y $67 mil millones de dólares.

En relación a estimado del año previo, esto representa un crecimiento de 4.1% hasta 5.7%. Además del impulso del empleo en la construcción, creemos que al menos otros dos factores contribuirán al crecimiento de los flujos, destacando:
(1) Ganancias laborales en algunos rubros de servicios, esperando que el consumo se mantenga relativamente resiliente; y
(2) una moderación adicional de las presiones inflacionarias.
Sobre esto último, nuestra expectativa es que la métrica anual mantenga una trayectoria a la baja durante buena parte del año, lo que debería tener una derrama positiva en las percepciones reales. Si bien estas últimas se han recuperado, aún se aprecian un tanto bajas. No obstante, un factor que seguiremos considerando a lo largo del año es el tipo de cambio, reconociendo que la fortaleza durante el año pasado mermó el poder adquisitivo de estos recursos. Para 2024 vemos que la positiva tendencia del MXN podría mantenerse en el primer semestre, aunque con mayores retos para la segunda mitad. Finalmente, otro riesgo clave que debemos considerar es el proceso electoral en EU, con la contienda presidencial perfilándose hacia una revancha entre el presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump.