Mientras el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, y el director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), José Antonio González Anaya, concluían el fin de semana una visita de trabajo de dos días en Londres, Reino Unido, para convencer a los industriales de que inviertan en México, aquí sigue la angustia por las decepcionantes cifras de la balanza comercial de octubre.
En efecto, el saldo comercial de octubre fue deficitario en 900 millones de dólares (md), cifra menor a la que anticipamos, y con una diferencia mayor sobre al consenso, y también inferior al déficit de mil 498 md de octubre de 2015. Así, el déficit acumulado de enero a octubre de este año sumó 13 mil 363 md, ligeramente mayor al déficit de 12 mil 323 md del mismo periodo del 2015. Las exportaciones totales cayeron en octubre 5.3 por ciento a tasa mensual y 3.5 por ciento a tasa anual, sobre una base ajustada por estacionalidad. La caída mensual derivó básicamente de la contracción en exportaciones de manufacturas, 5.9 por ciento mensual, donde las automotrices cayeron 5.8 por ciento mensual y las no automotrices 6.0 por ciento. Las exportaciones petroleras prácticamente sin cambio (0.1 por ciento mensual), tras dos meses de fuerte avance.
En términos anuales -nos explican los analistas de Citibanamex-, se revirtió el repunte de septiembre. Las exportaciones no automotrices disminuyeron 6.9 por ciento, mientras que las automotrices lo hicieron en 1.9 por ciento. Por su parte, las exportaciones de petróleo aumentaron 3.3 por ciento anual, debido al repunte de los precios del petróleo (8.7 por ciento anual para la mezcla mexicana de exportación). Las importaciones también decepcionantes. Registraron caídas de 6.4 por ciento mensual y 4.1 por ciento anual sobre la base ajustada estacionalmente. Al excluir productos derivados del petróleo, las importaciones cayeron 6.9 por ciento mensual y 5.7 por ciento anual. Dentro de las últimas los tres segmentos tuvieron descensos mensuales y anuales. En comparación mensual, caídas de 1.2 por ciento, 7.6 por ciento y 7.9 por ciento para bienes de consumo, intermedios y de capital, respectivamente. En comparación anual, las caídas fueron de 10.7 por ciento, 5.2 por ciento y 3.5 por ciento, en el mismo orden.
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