Sí, la corrupción debe ser una prioridad para cualquier gobierno.

La corrupción es un problema mundial que no abarca solo a los gobiernos y a las instituciones oficiales. Es un mal que aqueja a todas las actividades y estratos de la sociedad, y las empresas privadas no son la excepción. En el marco del día mundial contra la corrupción que se celebró este lunes 9 de diciembre, la firma de inteligencia laboral e integridad, Accupeople Intelab que preside Fernanda Zenizo López, dio a conocer los resultados de un estudio acerca de la conducta de los empleados al interior de los negocios.
A través de su herramienta de evaluación, que aplica con fines de empleabilidad, detectó en un universo de 200 mil personas, entre los años 2017 y 2019, que los hombres representan los mayores niveles de riesgo en materia de honestidad en una proporción de 58 por ciento, contra 42 por ciento en el caso de las mujeres. El rango más peligroso para las organizaciones es la población que fluctúa entre 19 y 29 años, con el 51 por ciento, seguido con 31 por ciento por personas entre 30 y 39 años. En menor grado el riesgo está latente entre empleados de 40 a 49 años con 12 por ciento de probabilidad de actuar deshonestamente, y finalmente las personas en edad de 50 a 75 años solo representarían un riesgo para la organización en un 5 por ciento de los casos.
En cuanto al nivel educativo son más susceptibles de representar un peligro de corromperse o llevar a cabo acciones incorrectas, aquellas personas con licenciatura, representando el 39 por ciento del riesgo. Quienes tienen una escolaridad media superior significan un peligro latente del 21 por ciento, los de carrera técnica 6 por ciento y los de posgrado solo el 3 por ciento de riesgo. El estudio reveló que el perfil laboral riesgoso por estado civil es más o menos parejo, ya que los casados representan un peligro potencial en el 51 por ciento de los casos y los solteros en 49 por ciento.
Sin embargo, destaca que las características sociodemográficas de individuos con alto riesgo para trabajar en una empresa corresponden a los hombres sin pareja, sin hijos, en una edad de 40 a 49 años y con carrera técnica. Dicha combinación sería la de más cuidado.