Se esperaba un superávit, pero fue un déficit de (-) $3,004 millones de dólares

Lo anterior, a pesar del sólido avance de las exportaciones (12.2%), y a un sorpresivo aumento de 24% anual en las importaciones no petroleras que generó un saldo deficitario en la cuenta de comercio. Al interior de las exportaciones, destacó el repunte de la parte no automotriz (18.7%). Y el rubro automotriz mostró una contracción de 5.2% respecto a marzo de 2020.
Los flujos de comercio se vieron fuertemente impactados a la baja con el inicio de la emergencia sanitaria hace un año. Con la recuperación del sector externo, impulsada por el crecimiento norteamericano, las exportaciones podrían consolidarse nuevamente en los niveles registrados antes de la pandemia. Y la importación de bienes intermedios fue elevada gracias al repunte en las manufacturas. Por otra parte, habrá que confirmar si los sorpresivos niveles que se reportaron para las importaciones de bienes de consumo y capital, se sostienen durante los siguientes meses.