Cuando un buen amigo me invitó a comer comida yucateca al Festival de la Hacienda de los Morales, me dije: bueno, me llevo mi antiácido, y listo. Pero no, aquella imagen de comida rica, pero grasosa, quedó atrás. Hoy, se puede hacer un viaje gastronómico por las delicias de Yucatán, sin salir de la Ciudad de México. El director de ese feudo gastronómico, Fernando del Moral, nos explicó:“a Yucatán se puede ir antes o después del fin del mundo”, dice el refrán popular que nos remite a las maravillas de una región que además de albergar ruinas arqueológicas como Chichén Itzá y Uxmal, es reconocida por sus deleites culinarios. Y -afirmo yo-, ya no se necesitan antiácidos.
Yucatán, la tierra del faisán y del venado, en el Festival de La Hacienda de los Morales
Publicado en Uncategorized
Deja un comentario