El nuevo director de la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), Ángel Carrizales, apoyado a capa y espada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, será una piedra en el zapato para Víctor Toledo Manzur, titular de la Semarnat.
Este panorama avizora un choque de trenes entre Carrizales y Toledo, del cual puede salir raspado el titular de la Semarnat, quien debe medir el apoyo presidencial que tiene el bisoño director de la ASEA. Cinco veces rechazado por el Senado para ocupar cargos en el sector energético. Dos veces para comisionado de la CRE, dos más para un asiento en el Consejo de Administración de Pemex, y una última vez para el órgano de gobierno de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, Carrizales fue finalmente colocado en el cargo por el Jefe del Ejecutivo.
Toledo es intolerante con el crecimiento industrial, turístico y comercial, bajo el pretexto que toda empresa contamina, argumento absurdo, pero es un ambientalista preparado y simplemente no tolera la ignorancia de Carrizales. La ASEA es un órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que regula y supervisa la seguridad industrial, seguridad operativa y protección al ambiente respecto de las actividades del sector hidrocarburos.
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